Cuando te veo no sé qué hacer. Mi mente se queda en blanco, mi cuerpo se inmoviliza, el aliento se me va y, si te tengo cerca, tengo ganas de abrazarte, de besarte, de que te quedes conmigo toda la eternidad, pero eso es casi imposible y me tengo que conformar con una sonrisa y una mirada tuya, que eso llena todo mi ser.
sábado, 30 de mayo de 2009
AY, AMOR...
Cuando te veo no sé qué hacer. Mi mente se queda en blanco, mi cuerpo se inmoviliza, el aliento se me va y, si te tengo cerca, tengo ganas de abrazarte, de besarte, de que te quedes conmigo toda la eternidad, pero eso es casi imposible y me tengo que conformar con una sonrisa y una mirada tuya, que eso llena todo mi ser.
lunes, 25 de mayo de 2009
EL PODER DE LAS PALABRAS
…Y de pronto, el milagro ocurrió. Entré en el aula en la que tenía la siguiente clase y escuché una voz que decía:
-“Hola, Bea, ¿qué tal estás? ¿Cómo llevas el día?”
Yo alcé los ojos y vi la sonrisa dulce de una alumna que me miraba esperando una respuesta. En aquel momento dejé de ser transparente y la nube de tormenta se había esfumado. Aquella chica había conseguido alegrarme el día con aquel puñado de palabras.
Las palabras tienen un poder, una fuerza imparable. Todos deberíamos usar ese poder para hacer felices a los demás. Es muy fácil.
... Y CUANDO FALTAN LAS PALABRAS
…las miradas lo dicen todo.
Lo que más me impactó cuando llegué a Estambul no fue la Mezquita Azul, ni Santa Sofía, ni el Gran Bazar, ni el Bazar de las Especias, no, no fue un lugar. Lo que más me impactó fue la mirada de la gente.
Al principio, la mirada de los turcos me intimidaba. Te miran directamente a los ojos y te atrapan. Yo era incapaz de mantenerles la mirada, por pudor, o por convencionalismos sociales. Al ver que me miraban, retiraba la mirada.
Sin embargo, con el paso de los días, eso de mirar a los ojos me fue gustando cada vez más, se convirtió en un juego para mí. Pensaba “a este le aguanto la mirada hasta que lo pierda de vista”. A medida que avanzaba “el juego” empecé a “hablar” y a “escuchar” a las personas con las que me cruzaba. Y descubrí algo maravilloso. No me hacía falta saber turco para hablar con aquella gente. Lo que en un principio era intimidante se convirtió en algo que me aportaba sensaciones nuevas y muy agradables.
Cuando llegué a Barajas, en el aeropuerto, quise seguir “hablando” con la gente con la que me cruzaba, pero no encontré más que silencio. En esta sociedad “avanzada” nuestra, en la era de las comunicaciones y de las telecomunicaciones, la gente no se mira, no habla con los ojos. La de mensajes que se están perdiendo en el silencio de las miradas.
Beatriz Lardón.
miércoles, 13 de mayo de 2009
Y LAS NORIAS FUE UN PURO TEATRO
El domingo se representó en el Auditorio una divertidísima comedia original de Estela Aguilera. En ella, participaron varios alumnos y exalumnos de nuestro centro, obteniendo un éxito más que considerable. Al día siguiente fue el Teatro Municipal el que acogió la formidable adaptación que un grupo de profesores y alumnos del IES –dirigidos por María González Clemente- ha realizado del clásico El sueño de una noche de verano, de William Shakespeare. Además de la formidable puesta en escena, destacaron tanto la caracterización como el vestuario de los actores.
Por último, el broche de oro lo puso en la noche del martes la compañía formada por la Asociación de Mujeres de Las Norias, con la representación de otra comedia original de Loli Velasco, madre de una de nuestras alumnas. La obra, que fue divertidísima, logró llenar el Auditorio Municipal con más de mil personas que disfrutaron de lo lindo.
miércoles, 6 de mayo de 2009
ROMEO Y JULIETA O JULIETA Y ROMEO
SIEMPRE HACIA EL FRENTE
Acaso no sabes que lo descubierto es absurdo pretender redescubrirlo. No pierdas el tiempo en hallar otros ojos como los suyos, no busques un encuentro que ya ha pasado. No busques la casualidad que te llevó hasta aquel dichoso instante en que tu vida cambió. La casualidad… ¿existe?
Deja que fluya el tiempo, que se deslice el viento entre tus dedos, trayéndote a cada instante un nuevo sentimiento, una nueva sensación, una nueva ilusión. No malgastes tu vida en revivir el pasado. Mantenlo en el recuerdo y aprovecha cada instante para absorber, empaparte de cada esencia nueva que los días traen para ti.
Aunque tampoco olvides todo aquello con lo que has llenado tu vida. Tan importante es recordar lo inolvidable como vivir lo palpable.