sábado, 30 de mayo de 2009

AY, AMOR...


Ay amor, tú que me dijiste que me querías, que sin mí no vivías, que soy el perfume de los perfumes, que soy la estrella que ilumina tu mirada y el alba de tus mañanas. Ahora descubro que no soy nada para ti, que todas esas cosas tan bellas que me decías no eran verdad o, a lo mejor, lo eran, pero me haces pensar lo contrario.

Amor, me has roto el corazón en mil pedazos, ya no tengo razón de vivir. Sin ti es como si me faltase el aire. Tú eres el sol que ilumina mis días, la estrella que ilumina mi ventana cuando no te puedo ver. Te quiero tanto que no tengo palabras para expresarte cuánto siento por ti. Te quiero tanto que lo que siento por ti no me cabe en el pecho. El corazón me grita que te diga cuánto te quiero, pero no puedo. Tú me fallaste, me engañaste, me decepcionaste.

Cuando te veo no sé qué hacer. Mi mente se queda en blanco, mi cuerpo se inmoviliza, el aliento se me va y, si te tengo cerca, tengo ganas de abrazarte, de besarte, de que te quedes conmigo toda la eternidad, pero eso es casi imposible y me tengo que conformar con una sonrisa y una mirada tuya, que eso llena todo mi ser.

Lidia Gaspar Donquem 3ºC

lunes, 25 de mayo de 2009

EL PODER DE LAS PALABRAS


Un día cualquiera en mi vida como profesora, iba yo de una clase a otra, centrada en mis cosas, mis libros, mis apuntes, mis exámenes… Como una autómata cambiaba de aula, tratando de explicar lo que tocara ese día, intentando que los alumnos me escucharan, que entendieran las explicaciones, que participaran…Era uno de esos días en los que sientes que eres transparente, que nadie te escucha o te atiende, que a nadie le importa lo que digas o hagas. Era uno de esos días en los que me sentía mal, parecía que llevaba una nube de tormenta encima de la cabeza…

…Y de pronto, el milagro ocurrió. Entré en el aula en la que tenía la siguiente clase y escuché una voz que decía:

-“Hola, Bea, ¿qué tal estás? ¿Cómo llevas el día?”

Yo alcé los ojos y vi la sonrisa dulce de una alumna que me miraba esperando una respuesta. En aquel momento dejé de ser transparente y la nube de tormenta se había esfumado. Aquella chica había conseguido alegrarme el día con aquel puñado de palabras.

Las palabras tienen un poder, una fuerza imparable. Todos deberíamos usar ese poder para hacer felices a los demás. Es muy fácil.


Beatriz Lardón.

... Y CUANDO FALTAN LAS PALABRAS


…las miradas lo dicen todo.

Lo que más me impactó cuando llegué a Estambul no fue la Mezquita Azul, ni Santa Sofía, ni el Gran Bazar, ni el Bazar de las Especias, no, no fue un lugar. Lo que más me impactó fue la mirada de la gente.

Al principio, la mirada de los turcos me intimidaba. Te miran directamente a los ojos y te atrapan. Yo era incapaz de mantenerles la mirada, por pudor, o por convencionalismos sociales. Al ver que me miraban, retiraba la mirada.

Sin embargo, con el paso de los días, eso de mirar a los ojos me fue gustando cada vez más, se convirtió en un juego para mí. Pensaba “a este le aguanto la mirada hasta que lo pierda de vista”. A medida que avanzaba “el juego” empecé a “hablar” y a “escuchar” a las personas con las que me cruzaba. Y descubrí algo maravilloso. No me hacía falta saber turco para hablar con aquella gente. Lo que en un principio era intimidante se convirtió en algo que me aportaba sensaciones nuevas y muy agradables.

Cuando llegué a Barajas, en el aeropuerto, quise seguir “hablando” con la gente con la que me cruzaba, pero no encontré más que silencio. En esta sociedad “avanzada” nuestra, en la era de las comunicaciones y de las telecomunicaciones, la gente no se mira, no habla con los ojos. La de mensajes que se están perdiendo en el silencio de las miradas.

Beatriz Lardón.

miércoles, 13 de mayo de 2009

Y LAS NORIAS FUE UN PURO TEATRO

Este fin de semana Las Norias ha tenido un protagonismo especial en las Jornadas de Teatro Aficionado que se han celebrado en El Ejido.

El domingo se representó en el Auditorio una divertidísima comedia original de Estela Aguilera. En ella, participaron varios alumnos y exalumnos de nuestro centro, obteniendo un éxito más que considerable. Al día siguiente fue el Teatro Municipal el que acogió la formidable adaptación que un grupo de profesores y alumnos del IES –dirigidos por María González Clemente- ha realizado del clásico El sueño de una noche de verano, de William Shakespeare. Además de la formidable puesta en escena, destacaron tanto la caracterización como el vestuario de los actores.

Por último, el broche de oro lo puso en la noche del martes la compañía formada por la Asociación de Mujeres de Las Norias, con la representación de otra comedia original de Loli Velasco, madre de una de nuestras alumnas. La obra, que fue divertidísima, logró llenar el Auditorio Municipal con más de mil personas que disfrutaron de lo lindo.


miércoles, 6 de mayo de 2009

ROMEO Y JULIETA O JULIETA Y ROMEO


El pasado domingo se representó en el Teatro Municipal de El Ejido la obra Romeo y Julieta o Julieta y Romeo por parte de una compañía de alumnos dirigida por la profesora María Ruiz Calvente.

El espectáculo fue maraviloso y, desde este blog, queremos felicitar a todas aquellas personas que han colaborado con el montaje de alguna u otra manera.


¡Ánimo, chicos, y a ver cuándo es la próxima!

SIEMPRE HACIA EL FRENTE


Cuando buscas en alguna mirada algo que has perdido es como dar pasos en la oscuridad.

Acaso no sabes que lo descubierto es absurdo pretender redescubrirlo. No pierdas el tiempo en hallar otros ojos como los suyos, no busques un encuentro que ya ha pasado. No busques la casualidad que te llevó hasta aquel dichoso instante en que tu vida cambió. La casualidad… ¿existe?

Deja que fluya el tiempo, que se deslice el viento entre tus dedos, trayéndote a cada instante un nuevo sentimiento, una nueva sensación, una nueva ilusión. No malgastes tu vida en revivir el pasado. Mantenlo en el recuerdo y aprovecha cada instante para absorber, empaparte de cada esencia nueva que los días traen para ti.

Aunque tampoco olvides todo aquello con lo que has llenado tu vida. Tan importante es recordar lo inolvidable como vivir lo palpable.
Lydia García López.